Qué se puede esperar
¿Qué se puede esperar de quienes emergieron a la escena política venezolana tras un golpe frustrado que pretendía derrocar al sistema democrático del país?
¿Qué se puede esperar de quienes al llegar al poder destruyeron la Constitución Nacional, de quienes al llegar a Miraflores empezaron a socavar las instituciones del Estado y emprendieron la división del pueblo?
¿Qué se puede esperar de quienes fomentaron las expropiaciones, el odio de clase y enfrentaron hermanos contra hermanos a través de la organización de los círculos bolivarianos, y después de los llamados “colectivos”?
¿Qué se puede esperar de quienes han devaluado el bolívar hasta hacerlo simple cenizas aniquilando su valor real, convirtiéndolo en un despojo de lo que algún día fue?
Sin duda, no podemos esperar nada bueno de quienes han amedrentado, encarcelado, discriminado y torturado a millones de venezolanos a lo largo de 25 años de régimen.
Que podemos esperar nada de quienes se inventaron la “Lista Tascón”; de quienes crearon mecanismos de presión social encubiertos en actividades sociales.
¿Qué se puede esperar de quienes llenaron nuestros cuarteles de cubanos, rusos, iraníes y chinos?
No podemos esperar nada que sea relativamente aceptable de quienes han traicionado al pueblo, de quienes no cumplen sus palabras y de quienes han sido los responsables de la pérdida de miles de vidas de inocentes.
Son ellos mismos los que se robaron las elecciones presidenciales del 28 de julio; son los mismos que ahora acaban de dar un golpe de Estado al juramentar írritamente a Nicolás Maduro como presidente de Venezuela.
¿Qué se puede esperar de una gente que no tiene moral, sentido del honor y que forman parte de una camarilla podrida y sumergida hasta el cuello en actos ilegales de toda índole?
De aquellos que son convictos y confesos de reiteradas violaciones de los derechos humanos; que son responsables de atrocidades sin nombre que cada vez pesan más en los expedientes que poseen en los tribunales internacionales.
Por eso, no es nada extraño lo que está sucediendo en el país; no es extraño para los venezolanos ni para el mundo. Esto es parte de un modus operandi que lleva mucho tiempo ejerciéndose.
Sin embargo, es claro que ellos no tienen la misma fuerza de antes.
Está muy claro que están pendiendo de un hilo y que éste se les puede reventar en cualquier momento.
Están débiles y ellos lo saben, por eso le tienen miedo a María Corina Machado, y por eso millones de venezolanos confían en ella para que concrete la libertad para Venezuela.
Sin más que agregar, nos leemos la próxima semana.
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