25 personas han sido desmembradas en la región central
La madre de Gabriela Guédez, joven que fue hallada descuartizada en Caucagua, denunció que el taxista que viajaba con ella sigue desaparecido y el asesinato está impune. Es uno de los casos atribuidos a organizaciones delictivas
10 DE OCTUBRE 2016 - 12:01 AM
El lunes 12 de septiembre a la 1:00 pm, Gabriela Guédez, de 27 años de edad, había acordado con su amigo Alexander Espinoza que la buscara en su casa, localizada en el sector Ceniza de Araira, en Guatire, a la 1:30 pm. Ambos iban a hacer un recorrido por varias farmacias para buscar medicamentos que su ginecólogo le había indicado.
Espinoza era el taxista de confianza de la familia de Guédez, docente que trabajaba en una tienda en Guarenas. Él fue puntual. Antes de marcharse, la madre le dijo: “Ten cuidado, mira que a esos taxis los roban a cada rato”. Y Guédez la tranquilizó: “Tampoco vamos a andar paranoicos”. Subió al vehículo Chery Orinoco, propiedad del chofer, y se fue.
Al caer la noche y preocupada porque su hija no se había comunicado, su madre, Jaqueline, la llamó, pero su celular estaba apagado. También el del taxista. Al día siguiente la mujer denunció la desaparición ante el Cicpc de Guarenas. Debía esperar 48 horas para que se iniciara la búsqueda. Ese día se enteró de que el carro del taxista lo hallaron abandonado en la vía Caucagua-Guatire. El jueves 15 de septiembre recibió una llamada de la policía científica: habían hallado unos restos cerca de la quebrada Pantoja de Caucagua. Encontraron una cabeza y dos brazos, en uno de los cuales colgaba una pulsera con una perla roja como la que llevaba puesta la joven cuando desapareció. “Era mi hija y aunque este hecho no tiene nombre, mi formación cristiano-evangélica me permitió perdonar a los que cometieron este crimen tan atroz. No puedo vivir encadenada al odio”, expresó la mujer.
Han transcurrido 25 días del hallazgo y aún no dan con el conductor ni han sido identificados los responsables. En el Cicpc suponen que el objetivo de los homicidas era Espinoza, pero decidieron eliminar a la joven para no dejar testigos. También que se trata de una banda que opera en Barlovento.
Guédez es una de las 25 personas que han sido encontradas descuartizadas este año en la región central del país, entre los estados Miranda y Aragua. Solo en Guarenas, Guatire, Barlovento y Valles del Tuy, en la región mirandina, fueron asesinados 12 hombres, entre los meses de agosto y septiembre, bajo esa modalidad.
Una práctica extensiva. Este tipo de asesinatos se ha convertido en una práctica común entre bandas rivales que se disputan una plaza de drogas o un territorio. También es una forma de transmitir lo que son capaces de hacer e infundir temor, según fuentes policiales. En Barlovento están identificados 15 hombres que integran la banda del Teleférico que opera en Caucagua y se encarga de desmembrar a los que se atrevan a disputarle la plaza de drogas en cuatro comunidades del municipio Acevedo, como ocurrió con las tres personas que fueron decapitadas en una vivienda del sector Los Chaguaramos, el pasado 23 de septiembre.
En Valles del Tuy, 15 bandas delictivas están en pugna. Dos de ellas, la organización de Súcuta y la del Cerrito en Ocumare se disputan los lugares donde enfrían los vehículos robados y los sitios donde operan, de acuerdo con la investigación policial. Los conflictos entre ellas han dado como resultado cerca 10 hombres desmembrados, cuyos restos son exhibidos en las paradas, las plazas e incluso frente a planteles escolares para aterrorizar a la población.
También ocurren en estado Aragua. Dejan mensajes por delatores a los que se atreven a denunciarlos con la policía. Hasta ahora han identificado a cuatro organizaciones delictivas que operan en San Mateo, La Victoria y Maracay.
5% de los asesinatos son descuartizamientos
El comisario Luis Godoy, ex jefe de homicidios del Cicpc, destacó que el repunte de estas prácticas criminales sucede en las llamadas zonas de paz, donde la policía no entra porque están tomadas por las organizaciones delictivas. Este modus operandi es copiado de los carteles mexicanos y colombianos que descuartizan a los delatores y a los que se adueñan del botín, producto de sus negocios del narcotráfico, explicó. “5% de los asesinatos registrados en el país corresponde a descuartizamientos. A finales de los noventa este tipo de homicidios ocurría una vez al año y las víctimas eran hombres y extranjeros por casos ligados al narcotráfico. Ahora también figuran mujeres”, dijo.
Tres meses de horror
** El 9 de enero fueron hallados los cuerpos decapitados de tres jóvenes en el sector San Bernardo de Ocumare del Tuy.
** El 23 de febrero fueron localizados los cadáveres descuartizados y quemados de dos oficiales de Poliaragua en el sector Palo Negro de Maracay.
** El 7 de septiembre hallaron los cadáveres decapitados de dos adolescentes de 17 años de edad en el sector Las Casitas del municipio Zamora. Tenían las cabezas dentro del abdomen.
** El 17 de septiembre el taxista Ender Méndez fue hallado decapitado junto a su pasajero en la población de Aramina, municipio Buroz.
18
cadáveres desmembrados fueron localizados en el estado Miranda en lo que va de año
7
cuerpos mutilados hallaron en el estado Aragua durante 2016
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