Cierran Año Jubilar en la región insular
El Jubileo de la Misericordia crea una mayor sintonía espiritual con judíos y musulmanes, que también consideran la misericordia como el primer atributo del Dios único.
Mario Guillén Montero | @imathiox
El obispo Fernando Castro Aguayo ofició la misa de acción de gracias. / Foto: JHONNATAN BENITEZ
SOL DE MARGARITA, 13 Nov, 2016 | El Año Santo de la Misericordia, propuesto por el papa Francisco en abril de 2015, e iniciado el 8 de diciembre del mismo año, llega a su fin hoy en todas las diócesis del mundo, y por ello se celebró una misa especial en la Basílica Menor de El Valle, la cual fue oficiada por el obispo de Margarita, monseñor Fernando Castro Aguayo, en compañía de los presbíteros Luis Eloy Serrano, Reinaldo Trejo, Emmanuel González y Dennys Marinquez.
Lo esencial de este jubileo fue pedir perdón a Dios y perdonar a las demás personas. La indulgencia que se gana al cruzar la Puerta Santa limpia las huellas que dejan en el alma y en la conducta los pecados ya perdonados en la confesión. La devuelve al estado original.
El Jubileo de la Misericordia crea una mayor sintonía espiritual con judíos y musulmanes, que también consideran la misericordia como el primer atributo del Dios único.
Al finalizar la misa de acción de gracias por los frutos espirituales, los creyentes en la Basílica Menor Nuestra Señora del Valle, bajo la presencia de la excelsa patrona marinera, entonaron el canto de El Magnificat.
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