La mayoría de las empresas venezolanas dejarán a un lado las fiestas navideñas, por la situación que atraviesa el país 
En estas navidades las tradiciones pasaron a un segundo plano, aunque para los venezolanos el “amigo secreto” era algo común en esta época, la situación económica del país ha obligado a alejarse de las costumbres.
Estas actividades solían realizarse en diferentes lugares, desde la fiesta de fin de año en los trabajo o con familiares.
En el lugar que fuera, el entusiasmo era el mismo, pues es el mes de compartir y se mantenía el suspenso de quién te regalaba, era lo que le daba el toque mágico al momento, sin embargo, todo ha cambiado.
La joven farmacéutica, Andreína Santoyo, trabajadora de la red de farmacias Saas, contó que lamentablemente hasta la fecha entre sus compañeros no han podido acordar si se realizará o no el acostumbrado amigo secreto.
Expresó que “ninguno tiene dinero y lo que medio consiguen es para comprar comida, la mayoría tienen hijos y prefieren comprarles sus juguetes y ropa”.
Hasta la empresa desconoce el lugar de la cena navideña, pues hablan de realizarla dentro de la misma farmacia.
El vendedor de la empresa CoCa-Cola en Caracas, Ángel Boyer, contó que este año los trabajadores no gozarán de la fiesta de fin de año, ni de la cesta navideña y mucho menos intercambio de regalo, para él,  la “inflación se ha consumido hasta las buenas costumbres”.
Recordó que el pasado año realizaron el acostumbrado amigo secreto, el límite fue de 20 mil bolívares, muchos de los trabajadores gastaron más de esa cantidad, pero este año la situación está “dura”.
Algo similar ocurrirá en las entidades bancarias del país, esta vez la cajera del Banco Bicentenario, ubicado en Chacaíto,  Anen Goitia, dijo que no “jugarán al amigo secreto”, pues no todos los empleados tienen para comprar “un perfume en 80 mil bolívares, ni una camisa de mujer en más de Bs. 40 mil, sin pensar en los hombres que la ropa suele ser más costosa”.
En otros tiempos se esmeraba con sus regalos hasta gastaba más de lo acordado,  porque también le gustaba que le dieran buenos obsequios.
Este panorama no afectará a los trabajadores de Pescalba Cumaná, quienes aseguraron que la empresa le realizará su despedida en navidad y alguno de los departamentos realizará sus tradicionales juegos.
La compañía agasajará alrededor de 420 empleados cómo lo han hecho todos los años y cada 1ero de mayo.
Ysamar Bastardo
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