Acontecimientos de Brasilia en enero: ¿Teatro o errores humanos?
El jueves 20 de abril, el diputado federal oficialista, Lindbergh Farias, indicó que Lula no sabía de los videos porque cuando él los pidió le fue informado que esas imágenes no existían ya que el sistema no funcionaba en el momento de los acontecimientos. En este sentido el diputado exige que se investigue esa quiebra de confianza y se pregunta sobre los reales intereses del General “¿A quién estaba queriendo proteger?” sugiriendo que habría colaborado con los ataques al Palacio deliberadamente. Todo esto contradice las declaraciones de Lula el pasado 23 de enero en el que asegura que sí tenía los videos en su poder y que sabía quienes habían sido o no negligentes en sus funciones.
Luego de que CNN publicara los videos de los acontecimientos del 8 de enero en Brasilia, ha salido a la luz una serie de informaciones que cuestionan la institucionalidad con la que actuó el gobierno ese día, el discurso de Lula sobre los hechos y el rol de los medios de comunicación ante esto.
Lula ya había dicho que los acontecimientos del 8 de enero habían sido un intento de golpe de estado de parte del bolsonarismo y que por ello era necesario despolitizar a la Fuerza Armada. Según sus declaraciones, para aquel momento ninguno de los sistemas de inteligencia habría funcionado para evitar los ataques.
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Por su parte, medios de comunicación pro gobierno cuestionan la veracidad de los videos diciendo que esto es un montaje que tiene su origen en el bolsonarismo, e incluso han intentado construir una narrativa de cancelamiento al autor del reportaje, el periodista Leandro Magalhães, para desacreditar no solo su labor periodística sino la verdad sobre los hechos expuestos. En cualquier caso, el peso de los acontecimientos han cobrado la primera renuncia del gobierno brasileño.
El jueves 20 de abril, el diputado federal oficialista, Lindbergh Farias, indicó que Lula no sabía de los videos porque cuando él los pidió le fue informado que esas imágenes no existían ya que el sistema no funcionaba en el momento de los acontecimientos. En este sentido el diputado exige que se investigue esa quiebra de confianza y se pregunta sobre los reales intereses del General “¿A quién estaba queriendo proteger?” sugiriendo que habría colaborado con los ataques al Palacio deliberadamente. Todo esto contradice las declaraciones de Lula el pasado 23 de enero en el que asegura que sí tenía los videos en su poder y que sabía quienes habían sido o no negligentes en sus funciones.
El ahora exministro jede del Gabinete de Seguridad Institucional (GSI), General Marcos Gonçalves Dias, declaró ante la Policía Federal el pasado viernes 21 de abril, por orden del Supremo Tribunal Federal. En su testimonio, dijo que habría entregado los videos a todas las instituciones del Estado. Siendo el GSI el encargado de la seguridad del Palacio, diputados federales de oposición como Carlos Jordy concluyen que si esto fue así, entonces el presidente Lula Da Silva habría escondido las imágenes.
Ante esta confusión y contradicciones, los oficialistas aseguran que los militares que estaban bajo el mando del General en ese momento, eran del gobierno anterior, por lo que infieren que hubo algún tipo de conspiración al respecto con el bolsonarismo. Vale la pena recordar que cuando Lula anuncia el nombramiento de varios ministros de su gabinete, a Gonçalves Dias lo menciona de primero para la GSI resaltando que ya había sido su jefe de seguridad por 8 años.
Mientras tanto, en el parlamento diputados y senadores de oposición hacen presión para la instalación de una Comisión Parlamentaria Mixta de Investigación (CPMI). Ya la bancada de oposición ha propuesto que los diputados Eduardo Bolsonaro, Alexandre Ramagem y André Fernandes, conformen la CPMI. Cabe destacar que Ramagem fue jefe de la Agencia Brasileña de Inteligencia (ABIN). Falta por confirmar quienes serían los senadores, resaltando que como oposición ya han conseguido el apoyo de 194 diputados y 37 senadores.
Recordemos que antes de los videos de CNN, el gobierno era contrario a la instalación de la comisión, sin embargo, esta postura ha cambiado. El gobierno ha colocado como nuevo jefe del GSI al periodista Ricardo Capelli. La próxima semana el presidente del senado tendría que anunciar la fecha de instalación de la CPMI, en la cual se determinará si lo que ocurrió fue un teatro o una serie de errores humanos concatenados.
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