Habla la esposa del migrante cubano detenido por ICE cuando estaba en una cita de rutina
El sorpresivo arresto ocurrió en una oficina de Miami Lake
El migrante cubano Luis Alberto Martínez podría ser deportado a la Isla tras reencontrarse con su esposa en Estados Unidos. (Captura de pantalla: Javier Díaz – Facebook)
Isdrey Borrego, esposa del cubano detenido ayer miércoles cuando acudió a una cita de rutina con el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés), en Miami Lakes, se encuentra desesperada y clama por ayuda para evitar la deportación de su pareja, identificada como Luis Alberto Martínez.
En una emotiva entrevista con el periodista Javier Díaz de Univisión, la mujer expresó su angustia y solicitó el apoyo de los políticos y de la comunidad. “Dónde están los políticos, dónde está María Elvira Salazar, donde están todas esas personas… que nos ayuden, necesitamos que hagan algo por nosotros”, dijo Borrego.
La cubana describió a su esposo como un hombre bueno y un amigo fiel, además de asegurar que ha cumplido con todas las normas migratorias exigidas por las autoridades del país norteño.
También pidió a las autoridades de la administración de Joe Biden que se sensibilicen y no separen a más familias, que solo buscan comenzar una nueva vida en el territorio estadounidense.
Los periodistas cubanos Javier Díaz y Mario J. Pentón compartieron en sus redes sociales el doloroso momento en que Martínez terminó preso por tener una orden de deportación final. En los videos se escucha a la desesperada familia del cubano lamentándose por la detención.
El antillano había compartido previamente sus temores ante el riesgo de ser devuelto a la Isla. “En caso de que yo mañana sea detenido, sé que mi esposa va a sufrir mucho. Ella no tiene a nadie en este país. Todo lo hacemos juntos. Ella depende de mí, yo dependo de ella”, dijo el migrante en una entrevista con Díaz.
Martínez tenía el formulario I220B, al igual que otros cubanos que han sido detenidos y deportados a su país de origen, a través de los vuelos de repatriación que se reanudaron luego de conversaciones entre Washington y La Habana.
La comunidad cubana radicada en el extranjero se mantiene atenta a estos casos, y espera que las autoridades encuentren soluciones justas que permitan a las familias vivir en paz y sin temor.
Los migrantes cubanos devueltos a la Mayor de las Antillas en dichos trayectos habían ingresado a través de la frontera sur o mediante la navegación a bordo de embarcaciones improvisadas. Las autoridades les permitieron permanecer en EEUU a través de una libertad bajo palabra que no les garantizaba una estancia segura en este país.
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